ESPIRALES DE LUZ

Resumen

Nos movemos, estamos en constante movimiento y no somos conscientes de ello. La luz acompaña cada movimiento advirtiéndonos de la impermanencia del día y del carácter único de cada instante. Mientras tanto el hombre se percibe inmóvil en el mundo y en esa falsa percepción el Universo se comporta como un gran instrumento musical, que tocan el sol y las nubes. La arquitectura se convierte en receptáculo final de este gran instrumento. Nosotros, como arquitectos, elegiremos qué partitura se interpretará. Para ello hemos de conocer como se imprime el movimiento de espiral, de traslación y de rotación en la materia,
en la envolvente arquitectónica. Cautivados por la magia de la última reforma realizada en el estudio de Juan Luis Trillo y Antonio Martínez realizamos allí una investigación sobre la luz y sus ciclos, desde este observatorio silencioso de lugares y tiempos
todas las historias son posibles.